miércoles, 6 de julio de 2016

Mientras todo arde

"¿Qué haría yo contigo? Te preguntas.
¿Qué hace un lobo con su presa?

Te devoraré.

Y al devorarte, te haría parte de mi.
De mis músculos, de mi sangre,
De mis colmillos.
Serás yo, en mí,
Seremos tú y yo en el todo,
Juntos, para siempre.

Nos quemaremos.

Y nuestras cenizas al viento
Alimentarán las esperanzas de los perdidos.

Danzaremos entre las estrellas.

Seremos la luz de las luciérnagas
y el sonido de los grillos.
Contemplaremos el renacer del sol
Y la muerte de la luna.
Custodiaremos la noche
Y amaremos el día.

Sonreiremos cuando se encuentren en el final del mundo.

Tú y yo, ahí estaremos,
Besándonos
Mientras todo desaparece...

... mientras todo arde".

martes, 5 de julio de 2016

REVERSIÓN

El estúpido ardor de tu partida me obliga
a levantar mis brazos en infructuosa queja,
así como los árboles elevan sus ramas
lamentándose de su inmóvil destino


Soles nocturnos atestiguan mi tristeza
mientras cabalgo con mi dolor,
rumiando este pesar en mis ojos.


Un largo amanecer alimenta y materializa
esta pesadilla diurna, entre tanto, río desconsolado
como chiquillo, intentando cambiar mi papel en la escena.


Me descompongo al pensar en tus caricias,
al sentir como tocas mis labios y me aplastas
con tu casi eterna voluntad.


Evoco tu tacto sintiendo como estalla mi dolor
cual supernova submarina, vaporizando mi carne,
vaciando éste cascarón y liberando ese fragmento de ti,
reintegrando luego mi ser a su forma primitiva,
a una forma anterior a ti.

HOLOCAUSTO


Tu, con el rostro velado y el corazón mellado
gozo anhelado por un mar quemado

Cielo ensombrecido, invierno nuclear que no deja nada florecer

Sonrisa insegura que esconde una dulce amargura
Espuma gris que ahoga la pequeña semilla

Agua oscura que oculta la muerte circundante
Tortura invisible y agotadora que disuelve tu ser

Así la avaricia desgarra tu piel
Así se acaba toda esperanza
Así se purgan todas las capas
Así terminas bebiendo solo hiel.

ANGUSTIA

No estás familiarizado con la ruina, estas acostumbrado a no perder.
No eres ajeno al dolor, es solo que ignoras su real trascendencia y
no asimilas el beneplácito de no tener.

Desprecias la fortaleza proporcionada por la carencia. 
Das tanta cosas por sentado, que a la final no tienes nada a lo que aferrarte cuando cae el telón.

Joven, incauto y desprevenido avanzas haca la tortura de los cambios.
Dolerá, dolerá cuando se derrumbe tu mundo,
dolerá cuando lo sientas moverse bajo tus pies.
Sentirás sus espinas clavarse de forma intangible en ti; percibirás con detalle 
como se extiende y te asfixia, de igual forma en que se estrangula un animal herido entre alambre de púas al tratar de huir.

Tu error consiste en ignorar que la vida es dinámica, es fuego; 
en donde el movimiento te moldea, te desgasta y el fuego te forja y te purifica.
No olvides que la vida es muerte y renacimiento, pero tu no vives porque no estas preparado para morir.

¡Surge de tu burbuja! Vive, renace, muta, sufre y se pleno. 
Permite que tus acciones justifiquen al menos todas las estrellas y segundos consumidos en la eternidad de cosmos, solo para crearte.

miércoles, 16 de enero de 2013

OBSESIÓN SIBARITA



Últimamente me he sentido vacío, y al verme desde afuera me pregunto: ¿por qué dejé de escribirte, si sólo pienso en revivir con el olor de las flores de la eterna primavera, que despiertan mis sentidos y los excitan? Pienso en ti sin pensarte, pues sólo te siento; es mi cuerpo el que te piensa, te extraña y te desea pues te quiero tan dentro que no puedas escapar de mí; que mi respiración pronuncie tu nombre, que tu respiración y la mía hagan música, que de mis poros broten tu lágrimas y mis lágrimas sean de felicidad porque te amo.

Porque quemarse en tu piel nunca fue tan delicioso, y que los rastros de tu sudor queden en mis manos y marquen mi cuerpo, que los astros sean silenciosos testigos de nuestra pasión.


¡Cómo quisiera poder pasar mi vida coleccionando todo de ti, tu fragancia, tu esencia, tus sueños!


No quiero sábanas, sólo quiero tu piel y tu mirada; quiero morder tus labios de nuevo para que se paralice el mundo y se inunde de nuestras sensaciones hasta que solo pueda escuchar mi corazón latiendo en sincronía con el tuyo: una sinfonía de goce y locura de dos cuerpos en la que nuestros gemidos sean la prueba misma de nuestro máximo placer, desfalleciendo, locos y hambrientos hasta el amanecer.



Malpefre 

Edición: Daniella De León

martes, 17 de julio de 2012

ENAJENACIÓN

No puedo levantarme, no quiero levantarme. Sólo quiero sumergirme en el océano de tu cabellera, quiero sortear el cielo interminable de tus ojos y aterrizar suavemente en tu piel. 

Quiero ahogarme en tus labios, quiero escalar por tu espalda y deslizarme entre tus pechos. No quiero recordar nada, no puedo olvidar nada, no quiero mirar atrás, no quiero que estés allí, lejos de mí.

Amor utópico y lejano, línea en el horizonte, que a cada paso que doy se proyecta alejándose de mí sin inmutarse; fantasía inalcanzable, romántica destrucción del escenario cósmico renacido desde el interior de mi alma y parido por mis poros sobre tu cuerpo.
Así te describe mi subconsciente, así te ve mi alma. Aún no sé quién eres, pero mientras lo descubro no quiero dejar de abalanzarme sobre ti. Así como lo hace el mar sobre la arena de la playa, de esa manera, y a la luz de una inmensa luna llena quiero fundirme con tu ser hasta encontrar una respuesta definitiva: ese auténtico sentimiento, si es que aún existe en mi interior, y bajo el cual quiero encontrar esa única verdad que alivie mis pesares y traiga, por fin, esa estúpida felicidad que enmascara mis cicatrices y adormece mi corazón.



Malpefre

jueves, 1 de marzo de 2012

VENUS


Te veo y temerosamente me acerco, y a medida que nuestra distancia se empequeñece siento como se va reduciendo el control de la razón con cada latido de nuestros corazones.

Me lanzo, solo para quedar deliciosamente enredado entre tus poderosos y sensuales labios, con los cuales me apresas, me sometes y me consumes. No soy más que una mosca envalentonada por el alcohol y la determinación de salir de esta incertidumbre y apresurarme a caer voluntariamente en tu trampa mortal.

Tus ojos gitanos me invitan y reducen mi voluntad, haciéndome olvidar donde estoy y silenciando todo a mi alrededor. Enzarzados en un desatado beso, reprimo un gemido cuando siento tu mano ascender por mi pecho haciéndome explotar en un éxtasis sensorial que se extiende por mi cuerpo, como un incendio en un bosque que ha sido olvidado por el reconfortante y delicado toque de la lluvia. 

Sometido en una silenciosa oración, mi espíritu se transmuta, digerido por los jugos de tu pasión, y se convierte en una parte de ti que crece y se aferra desesperadamente, aún cuando sabe que pronto será desterrado.

Logro liberarme, no sin antes dejar una parte de mí estampando una húmeda huella en tu memoria. De igual manera yo porto mi propio estigma, delicioso recuerdo que me acompañara en mis noches de inconclusa felicidad y soberana tristeza.

Y sonriendo, y suspirando, reviviré en las perennes noches que me aguardan, esa turbulenta velada en la que casi entrego mi existencia al impetuoso y desconocido calor de tu amor imposible.



Malpefre